POLONIA

Llegamos a Polonia el 20 de Arbil. Atracamos en Gdynia, un pueblo pesquero cerca de Gdansk Polonia. El lugar es hermosísimo, de verdad no esperaba algo así, a demás tuvimos días soleados después de mucho tiempo e hizo los días aun mas perfectos. Habían montón de niños por donde estábamos. El barco estaba muy cerca de un parque y una fuente donde podías hacer burbujas con una cuerda y un palo. Mi parte favorita de Polonia fueron los arboles, sin duda alguna. Con ellos note que la primavera ya esta aquí.

20 Abril 2019

Comí en un restaurante mexicano! pero nada se compara con nuestro sabor mexicano. (La salsa extra picante era simplemente de jitomate). Había una feria en la ciudad y ahí pasamos un rato en la tarde. Nos subimos a los carritos chocones y a algunos otros juegos, las ferias siempre son de lo mas divertido, aparte traíamos una buena banda.

21 Abril 2019

Hoy es pascua! Me levante antes que todos en la mañana y levante a mis dos amigas que iban a ser conejos de pascua conmigo. Escondimos muchísimos huesitos de chocolate por todo el barco y tratamos nuestras orejitas de conejo y la cara pintada. Cuando fue colores hicimos el anuncio de que la búsqueda iba a empezar. Y cuando dimos la señal todos salieron corriendo como perros enjaulados a buscar huevos de pascua.

Mas tarde ese dia salimos a caminar pero absolutamente todo estaba cerrado. Después de caminar por cuadras solo encontramos un lugar abierto que era como una tienda de conveniencia. Compramos para hacernos un sandwich en el parque e hicimos un picnic frente al árbol mas bonito de toda la ciudad. Estaba lleno de flores blancas y los pequeños pétalos caían al suelo por pontón como si estuviera nevando. Las ramas caían como árbol llorón y el contraste del verde con el blanco era simplemente perfecto.

Después caminamos hacia otro parque que estaba en una montaña, era mas bien un sendero y al final llegabas a unos juegos de niños.

Esa misma noche volvimos a ir a la feria, porque como a todos, nos encanta.

22 Abril 2019

En la mañana fuimos a un lugar llamado Jumpcity. Era un lugar de trampolines! Estuvimos ahí por una hora, jugamos quemados y nos aventamos mil y un veces a la alberca de espuma.

23 Abril 2019

Hoy fuimos a Gdansk con la escuela. Nos organizaron un tour para ir al campo de concentración de Stutenhoff tantito fuera de la ciudad. Lo que mas me impacto fue que mientras caminábamos por las cabañas y las explanadas de pasto, el sol brillaba, los pájaros cantaban, flores crecían con el pasto y el vago sonido de una ciudad al otro lado de las cercas me hacía que todo era aun mas terrible. Mientras era un excelente dia para las personas a unos metros del campo, para aquellos dentro era otro dia mas de frío, hambre y trabajo. Era una contradicción espeluznante.

El guía que nos toco fue muy bueno, el mismo nos llevo al siguiente sitio que visitaríamos ese dia. Nos hablaba del futuro de nuestra generación y la repetición de la historia. De como polonia ha cambiado y el porque la gente es como es. Nos contó historias personales y nos dijo que la mayoría de las familias tienen un trazo de la guerra y lo que pasaba en Polonia por aquellos tiempos sigue vivo en las mentes de la gente.

Ese mismo dia mas en la tarde caminamos ya por nuestra cuenta en Gdansk. Me enamore de la ciudad, de las calles y sus colores. Casonas viejas de ladrillos rojizos con foquitos amarillos iluminando los patios y Los canales y puentes y la gente en sus bicicletas.

Esa noche una niña del barco tiro sin querer la patineta del capitán al agua. Casi le da un ataque a ella y al capitán. Fue alrededor de las 7 y todavía había luz. Al parecer el fondo estaba a tan solo 5 o 7 metros y quizás existía la posibilidad de ir por ella. No había casi nadie en el barco para ese entonces, solo yo y algunos otros. Decidí tratar de intentar sacarla del agua. Encontramos una linterna de agua y me avente. EL agua estaba congelada, mas fría como nunca la había sentido. Mis músculos se tensaron al instante y apenas podía moverme, después de unos segundos mi cuerpo se empezó a acoplar un poco pero seguía temblando y el shock del frío era pulsante. La visibilidad era cero, apenas podía ver mis manos bajo el agua y todo el fondo tenia una capa gruesa de lodo. Era imposible, y mi cuerpo ya no podía aguantar el frío. Salí del agua y corrí directo a la regadera, aproveche para bañarme y lavarme el pelo que no había podido hacer en 2 días.

Polonia fue perfecto después de los días grises y fríos que tuvimos antes. Ahora hacia el siguiente puerto: St. Petersburgo.

Que emoción!

Eugenia